Las persecuciones a cristianos comenzaron con el César Nerón en el año 64 d. C. Nerón los hizo responsables del incendio que destruyó Roma en el año 64 y por eso los persiguió. Terminaron en el 305 con el emperador Diocleciano. Pero no fueron continuas ni generales, sino que los cristianos gozaron de algunos momentos de paz en que el número de los cristianos aumentaba en las grandes ciudades.
Tampoco vivían siempre en las catacumbas*. Allí simplemente se escondieron alguna vez. Lo normal era que se juntaran a celebrar la Eucaristía en las casas.
Tampoco todos los emperadores persiguieron a los cristianos. Hubo gente más tolerante y otros más feroces (como Decio, Valeriano y Diocleciano). Uno de los que más interés puso contra los cristianos fue el emperador Decio, ya que al llegar al poder, publicó un edicto en el que obligaba a todos los habitantes del imperio romano a realizar un sacrificio a los dioses romanos. Una vez realizado el sacrificio se les daba un certificado. Muchos Cristianos, ante el temor de morir sacrificaron a los dioses y por tanto se apartaron de la Iglesia, porque habían cometido un grave pecado que se llama apostasía*. Otros Cristianos fueron más astutos y consiguieron el certificado sin sacrificar a los dioses. Y otros muchos cristianos sufrieron una gran persecución.
Cuando pasó la persecución de Decio, la Iglesia tuvo el grave problema de si admitía de nuevo a los que habían renegado de Dios sacrificando a los dioses romanos. Hubo varías posturas, los que sí querían y los que no querían aceptarlos de nuevo. Por fin se decidió aceptarlos de nuevo, perdonar su pecado pero cumpliendo una gran penitencia.
Y... ¿Por qué eran perseguidos los cristianos?
Podemos establecer varias causas para estudiar el porqué fueron perseguidos los cristianos. Su actitud, aunque respetuosa con el Imperio Romano, en realidad no era de colaboración total:
- Se negaban a hacer el servicio militar.
- No participaban en los terribles espectáculos del circo.
- No daban culto al emperador y veían esto como una ofensa a Dios.
- Mucha gente veía a los cristianos como seres extraños que realizaban reuniones clandestinas de dudoso contenido.
- Fueron acusados de infanticidas (de matar niños pequeños), de antropofagia (es decir canibalismo) y de graves desórdenes morales.
- Fueron acusados de ateos y de ir contra las costumbres romanas, porque los romanos eran politeístas y los cristianos monoteístas.
- Fueron acusados de muchas cosas que no hicieron como el famoso incendio de Roma en el año 64 d. C.
- Los intelectuales de la época acusaban al Cristianismo de ser una doctrina absurda que era impensable para la época. Les parecía absurdo que un Dios se hiciera hombre, les parecía absurdo que ese Dios muriera en la cruz. Más absurdo les parecía la idea de la resurrección ya que ellos creían en la inmortalidad del alma pero no en la resurrección.
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ResponderEliminarNO DICE COMO ERAN CON LOS VECINO
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